Evil West

VAQUEROS CONTRA VAMPIROS

Lo nuevo de Flying Wild Hog, responsable de los juegos de acción Shadow Warrior y Trek to Yomi, es un juego de vampiros en el Salvaje Oeste que combina lo mejor de Doom y God of War.

Y no lo decimos nosotros (aunque también): sus responsables han reconocido que la perspectiva en tercera persona y cercana al protagonista se inspira en la del juego de Sony Santa Monica, mientras que el sistema de combos bebe de las mieles de Devil May Cry. La comparación con Doom sí la hacemos nosotros, pero porque las ejecuciones con las que podemos derrotar a los enemigos cuando les queda poca salud no solo son brutales, sino que también nos otorgan orbes de salud. Todo, para enfrentarnos a una epidemia de vampiros con una ambientación única, en la que no faltan los tópicos del Salvaje Oeste: caballos, puestas de sol, ferrocarriles, plantas rodadoras, pueblos abandonados...

Solo ante el peligro

El sistema de combate mezcla rotundos ataques cuerpo a cuerpo con diferentes tipos de armas a distancia. Además de un combo de cinco golpes, podemos lanzar a los enemigos por los aires para, a continuación, acribillarlos a balazos. Dante estaría orgulloso. Los puñetazos también nos permiten lanzar a los enemigos contra las trampas o explosivos que suele haber en los escenarios, así como contra otros enemigos, un aspecto que nos invita a aprovechar bien el terreno y a posicionarnos correctamente durante los enfrentamientos. A esto, se le suma el guantelete, que, además de añadir electricidad a los golpes, nos permite acercarnos a la velocidad del rayo a los enemigos o atraerlos. Es una herramienta esencial y viene de perlas para controlar el campo de batalla.