Me vale, vale, vale, me vale todo

Es imposible llegar a la sección de autoayuda en una librería sin toparse con diez títulos que te dicen que te tiene que empezar a valer algo. Las técnicas varían, pero en esencia nos explican que somos una sociedad a la que no solo le importan demasiado las cosas (aunque no parezca), sino que lo que nos importa pura pen… Ojo, todos estos libros tienen algo en común, y es que aseguran que no se trata de ser un pinche egoísta que solo piensa en sí mismo, sino de saber escoger qué te debe importar, porque solo así te va a poder valer madres lo demás.

- Por Mario Guerra

PARTE 1: LA TEORÍA

¿Cuánto te impta lo que te importa?

Yo siempre he pensado que en esta vida hay dos tipos de cosas: las que importan y las que no. Las que no nos importan, pues no son relevantes, ni las vemos ni sabemos de ellas y, si están cerca de nosotros, ni las notamos, porque justamente nos valen. Pero a veces nos hacemos medio güeyes para no sufrir tanto y decimos que hay cosas que ni nos importan (cuando sí son significativas) o que no deberían (cuando la verdad es que ya nos importaron). De esas son de las que vamos a hablar aquí.

Por ejemplo, de repente te enteras de que alguien anda hablando mal de ti (con razón o sin ella) y un amigo que te quiere te dice algo como “que te valga lo que digan de ti, toma las cosas de quien vienen”. La verdad es que si eso no te importara, no te afectaría, pero el caso es que sí te es relevante, porque a nadie le gusta que anden hablando mal de uno. El verdadero problema es decidir si eso que pasa te está importando en la cantidad suficiente y de la forma correcta. A veces hay cosas que nos importan más de la cuenta y otras menos. Cuando algo te importa más de lo que debería, te enojas, te da miedo, te vuelve loco la ansiedad o andas todo triste. Cuando algo te importa menos de lo que debería, lo descuidas y chance lo lastimas o hasta lo pierdes.

PA’L QUE NO ENTENDIÓ